Cada 20 de marzo, coincidiendo con el inicio de la primavera, se celebra el Día Mundial de la Narración Oral o Día Internacional del Cuentacuentos. Se trata de una iniciativa que surgió por primera vez en Suecia en 1991 y a la que, con los años, se han venido sumando cada vez más países.

Consiste en que la mayor cantidad posible de narradores cuenten historias en todo el mundo, en todos los idiomas, durante el día y la noche. ¿Qué os parece si nos sumamos a la inciativa?

Podemos hacerlo creando en nuestro centro una exposición con paneles que recojan algunas de las producciones que hemos realizado a lo largo de esta secuencia didáctica: microcuentos y cuentos maravillosos versionados. Los ubicamos en el vestíbulo y en los pasillos del centro, añadimos los cómics que hemos diseñado para ilustrarlos y, además, los acompañamos de códigos QR, que nos lleven a la versión audio de los relatos. El documento  "Códigos QR para una exposición" nos enseña cómo hacerlo.

Aquí tenemos un ejemplo del resultado final:

Por otra parte, podemos organizar en la biblioteca del centro o en el salón de actos una lectura ininterrumpida de textos narrativos: cuentos y leyendas.

Otra opción es la de ponernos en contacto con un centro de Educación Infantil y Primaria de la localidad y organizar una sesión de cuentacuentos con los alumnos más pequeños. Podremos contarles las versiones originales de los cuentos maravillosos escogidos y nuestras versiones actualizadas. Para ello, conviene tener presentes las pautas recogidas en el documento de apoyo "Cómo hacer una lectura dramatizada".